La justicia procedió al sobreseimiento de Antonio Luna
La decisión de la fiscal se basó en la falta de pruebas que respaldaran la participación de Luna en el hecho. La jueza Belén Ocáriz, del Tribunal Oral en lo Criminal N°1, procedió entonces al sobreseimiento de Antonio Luna.
El Defensor Oficial, Dr. Pablo Prati, explicó que Luna había sido detenido y privado de su libertad por "presunción, sin pruebas" y que evidencia científica posterior corroboró que el arma utilizada en la muerte de Johana Rojas había sido disparada por la propia víctima.
La historia de Antonio Luna es la de un hombre que, proclamando su inocencia, pasó cinco años de su vida detrás de rejas, primero en una prisión y luego en arresto domiciliario. El juicio suspendido llegó después de un largo período de espera marcado por la incertidumbre y la dificultad.
La comunidad de Villa Ramallo se vio conmovida por la trágica muerte de Johana Rojas, quien falleció a raíz de un disparo de arma de fuego. Antonio Luna fue detenido como sospechoso de haber cometido el crimen, pero su voz clamando su inocencia no fue escuchada en aquel momento.
La nota compartida previamente por el Dr. Pablo Prati subrayó la situación vulnerable de Luna, un hombre de 66 años al momento de su detención, que vio su vida afectada y sus bienes despojados mientras esperaba el juicio.
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El desenlace sorprendente llegó gracias a la profesionalidad del cuerpo de peritos que participaron en la investigación, encabezados por el Comisario Inspector Retirado Sergio Daniele. Desde la justicia afirmaron que, evidencia científica confirmó días antes del juicio que Johana Rojas fue la responsable de su propia muerte, lo que llevó a la fiscal a retirar la acusación contra Antonio Luna.
Este giro en el caso marca el fin de una odisea legal para Antonio Luna, quien regresará a sus hábitos cotidianos, mientras la comunidad reflexiona sobre los cinco años de libertad arrebatados a un hombre cuya voz quedó en silencio ante la presunción de culpabilidad.