Tres miradas sobre la vuelta a la presencialidad en las escuelas de Ramallo

Este lunes comenzó el “Periodo de Intensificación de la Enseñanza” en las escuelas de Ramallo que se va a extender hasta el 26 de febrero. Este plan vincula el periodo 2020 con el 2021 y tiene como objetivo que los estudiantes en condición de trayectoria educativa en proceso, como discontinua, aprueben los trayectos curriculares en los meses de febrero, marzo y/o abril inclusive.

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Adriana Chiaparolli, Directora a de la Escuela Secundaria 4 “Hebe Noemí Báez” explicó “estamos muy felices de ver a los chicos en las escuelas nuevamente. Estamos muy entusiasmados con el entusiasmo de los alumnos y familias. Se han acercado muchos chicos a la escuela”
“No puede haber más de 15 alumnos por aula, según el protocolo de provincia, cada banca separado un metro con cincuenta, no es fácil porque los estudiantes tienen que concurrir con una declaración jurada de salud cada 48 horas. Estamos todos haciendo todos lo mejor cada uno de nosotras” indicó. 

Luego manifestó que “está faltando la pata del Estado, debo decirlo, según el plan jurisdiccional las escuelas deben contar con alcohol en gel, jabón líquido, toallas de papel descartables en los baños, y eso no ha llegado nada. Hemos recibido una partida muy pequeña de Consejo Escolar. De la provincia no llegó nada. Las escuelas dentro de nuestras posibilidades estamos poniendo el pecho. Para resolver estos temas en algunos casos ponemos plata de nuestro bolsillo. Estaremos en nuestro caso en la presencialidad mientras tengamos insumos. Estuvieron un año para prepararse y enviar las cosas a las escuelas. No ha llegado las máscaras para los docentes. Los docentes se han comprado las máscaras”

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María José Sánchez, Directora de la escuela Secundaria 1 de Villa Ramallo “Dr. José Antonio Nava” expresó “estoy emocionada ver volver a los chicos a las escuelas. Veo caritas sonrientes, estoy emocionada. La escuela es el lugar de encuentro que le puede dar esa posibilidad a los chicos”. 
Luego contó “nosotros contamos con todos los elementos, debo ser honesta, he tenido que sufrir a espera de ellos, nosotros nos organizamos en los pedagógico, organizacional y administrativo. Yo considero que Consejo escolar debería haber habilitado la posibilidad de que ellos nos alcanzaran los insumos y no que nosotros nos traslademos a buscarlos, porque en el medio de todo esto teníamos las jornadas institucionales, armas 300 bolsones y organizar la vuelta a clases. Igualmente nos organizamos y tuvimos lo necesario para comenzar”. 

Después recalcó “la organización de la escuela tiene que estar por encima de todos, pero hay muchas actividades que podrían llevarla a cabo otros. Hay otros agentes del estado que podrían cumplir con otras funciones que recargan de gran manera a los docentes, como sucede en el caso de los bolsones. Pero lo seguimos haciendo porque una familia sin alimentos es lo más triste que puede pasar y nosotros tenemos un compromiso pleno y lo seguimos haciendo”. 

Por último, remarcó “Hay que gestionar fuerte para que las cosas se hagan, hay que trabajar fuerte para que las cosas sucedan”

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Valeria Szurpik, es la directora de la Escuela de Educación Técnica Nº1 “Bonifacio Velázquez”, también se refirió a la revinculación presencial de los alumnos: “estamos nuevamente en la escuela. Nosotros comenzamos con los chicos que no lograron apropiarse de los conocimientos en el año anterior. Trabajamos en un protocolo que nos envió provincia”. 

Unos minutos después resaltó “no llegaron todos los elementos necesarios aún, pensábamos que iban a llegar. Muchos elementos se pudieron comprar desde la cooperadora”. 
 

“Nosotros estábamos muy ávidos por volver a la escuela. Los chicos que vuelven estos días realmente lo necesitaban. Lo veíamos estrictamente necesario. Desde la seguridad nos hubiese gustado hoy tener todos los elementos y las condiciones fuese distintos. Al estar divididos en tres turnos no se ha generado ninguna dificultad”. 

“Cuando vuelvan las clases presenciales vamos a volver de la formación técnica específica, es decir con los talleres, tenemos una matrícula de 800 alumnos y sería imposible volver todos en marzo. Entonces definimos empezar con los talleres en grupos de 15. El resto sigue desde la virtualidad y a medida que vaya pasando el tiempo vamos a ir adaptándonos con los espacios. Debemos garantizar el vínculo, la rutina, encontrarse con el otro, son todas cosas que ayudan el retorno”.