El ajuste que no llega
Mauricio Macri dijo: "Hay que bajar los gastos de la política y dar el ejemplo". Hace pocos días atrás durante su visita a Córdoba, en el encuentro de la Mesa Productiva Automotriz, el Presidente dijo que se reunirán con los gobernadores y los diputados para avanzar con la reducción del déficit.
"Hay que decirle la verdad a la gente y bajar los gastos de la política. Dar el ejemplo y después sentarse a hablar sobre qué privilegios estamos pagando, en este presupuesto, que no corresponden", manifestó a un medio cordobés Macri, agregó al ser consultado sobre sacar los subsidios a Capital Federal y Buenos Aires: "Todos tienen que trabajar lo mismo y pagar lo mismo" porque "es lo justo".
El discurso que suena políticamente correcto da lugar a preguntarle al presidente de la Nación porque no lo hizo el 10 de diciembre de 2015 y dejó fluir el costo de la política y de los políticos en la Argentina que es altísimo. ¿Porque no desactivó la fábrica de millonarios a costo cero?.
Es una mentira que los políticos de todo el arco se encargan en sostener eso de que en la Argentina el costo de la política o mejor dicho de los políticos no tiene incidencia. En el corredor norte de la provincia de Buenos Aires, entre cargos nacionales y provinciales hay 96 sillas de funcionarios que cobran sueldos mayores a los 100 mil pesos y que ni el kirchnerismo con su discurso tan atildado y preocupado por la distribución equitativa del dinero y los pobres, ni Cambiemos con su cruzada ética se encargó en modificar.
Un comerciante local en la semana vía whatsApp contaba en la radio Ramallo “me estoy fundiendo trabajando. No puedo sostener los costos del negocio y los más probable es que tenga una decisión contra mi voluntad en los próximos meses”.
Esa situación es la que la clase dirigente en la Argentina, no le interesa ver, hasta hoy no hicieron nada por el contrario crearon 23 ministerios cuando en el 2003 había sólo 9. Hoy cualquiera que entra en política sabe que no va a tener problemas en llevarse un sueldo por encima de los 50 mil pesos sin tener riesgo alguno.
En el corredor norte de la provincia, la cruzada de la gobernadora María Eugenia Vidal parece no hacer efecto, los funcionarios provinciales llegan a las 10 de la mañana, pagan sus almuerzos con facturas que salen del dinero de los contribuyentes y a esto hay que sumarle, gastos de movilidad y otros viáticos, además de tener autos provinciales que se pagan del bolsillo de los bonaerense.
Hasta acá como mucho lo han dicho, el macrismo, es kirchnerismo con buenos modales. ¿Usted se imagina un funcionario provincial cobrando 20 mil pesos mensuales? ¿O cobrando la mínima que cobran los jubilados como solidaridad con los mismos? ¿Cumpliendo horas y con el rigor que Vidal le pide a los maestros, a la hora de la puntualidad? ¿Usted se imagina que las gestiones que se realizan o viajes a la ciudad de Buenos Aires o La Plata se paguen del bolsillo del particular y no del bolsillo de todos?.
Hoy cuando vemos el bajo interés en la participación política del resto de la ciudadanía detrás de una idea o un pensamiento, tiene una explicación, en que el esfuerzo del ciudadano de a pie cada vez es más grande cuando el “dirigente” cobra en algunos casos hasta dos sueldos sin inmutarse. Se niegan a presentar su declaración jurada o bien se enojan cuando se los cuestiona sobre actos de transparencia.
El lector puede pensar que el texto va en contra de la política y hasta de la misma democracia, no es así, porque la democracia se defendería mejor si la distribución fuera más equitativa, el paso por la política deja a dirigentes millonarios y sin sobresaltos de por vida. En Ramallo, y en gran parte de la Argentina.
Volver a los comienzos no es una mala idea en donde se discutían ideas, y no cargos como sucede por estos días.
Ramallo
Los sueldos del staff político en Ramallo, es alto, pero sería injusto caerle a este gobierno, porque en la gestión anterior este cuestionamiento no estaba tan a flor de piel.
Los concreto es que hoy la situación se debe rever tanto, en el plano de lo local, lo provincial y lo nacional, porque tirar tanto de la soga en tiempos de ajuste, de hacer malabares para vivir va a terminar generando situaciones indeseadas como sucedió por momentos en el 2001.