Preocupación en la industria metalmecánica del norte bonaerense por la importación de acero
El reciente anuncio del Gobierno nacional sobre la simplificación de la importación de acero ha generado fuertes reacciones en la industria metalmecánica del norte de la provincia de Buenos Aires y el sur de Santa Fe.
La medida, que incluye la eliminación de trabas burocráticas y la digitalización de procesos como el Repostock, pretende reducir el "costo argentino" y fomentar la competencia, con el objetivo de bajar los precios internos.
Sin embargo, los empresarios de la región ven la decisión con preocupación por el posible impacto en la producción local.
Las cámaras industriales de ambos distritos han expresado su inquietud ante el avance de productos importados, especialmente de China, que ya dominan buena parte del mercado global.
Temen que la reducción de barreras para la importación de acero perjudique a las fábricas locales, que no pueden competir en igualdad de condiciones con el bajo costo de los productos asiáticos.
Además, advierten que esta medida podría desencadenar una ola de cierres y despidos en las pequeñas y medianas empresas de la región, fuertemente ligadas a la producción metalmecánica.
"Sabemos que el Gobierno está buscando reducir costos para impulsar la actividad económica, pero debemos ser cuidadosos con el impacto que esto tendrá en la producción nacional", señalaron desde el sector.
Los dirigentes también enfatizaron que, si bien la competencia es necesaria, debe darse en un marco que contemple las asimetrías estructurales entre las industrias locales y los gigantes productores como China.
El sector metalmecánico es clave en esta región del país, y depende en gran medida de la producción local de acero.
Empresas de diversos tamaños se verán afectadas, desde los grandes productores hasta los pequeños talleres que proveen a la agroindustria y al sector automotriz.