Las autoridades judiciales y policiales detuvieron a un individuo acusado de realizar un secuestro extorsivo en Villa Ramallo en enero de este año
Claudio Daniel Coto, de 62 años, se encuentra bajo la lupa de la justicia por liderar una banda especializada en secuestros extorsivos, dejando una estela de crímenes en Rosario y Villa Ramallo. Con antecedentes por robo y falsificación de un 08, este individuo de Béccar, San Isidro, ha sido una figura esquiva para las autoridades, resguardándose en las sombras del delito.
Detenido el pasado martes en un inmueble de alquiler temporario en Martínez, Buenos Aires, Coto optó por el silencio al enfrentar la Justicia federal de San Nicolás durante su declaración indagatoria este jueves. Su historial delictivo incluye condenas previas por falsificación de un 08 y un robo en Concordia, pero su participación en secuestros extorsivos marca un nuevo capítulo en su carrera delictiva.
La División Antisecuestros de la Policía logró ubicar a Coto en un complejo operativo, desentrañando la red delictiva que orquestaba. Según las autoridades, su voz fue identificada en comunicaciones durante secuestros, donde instruía a las víctimas pasivas y gestionaba alquileres temporarios de casas que se convertían en lugares de cautiverio.
Bajo el alias de Juan Carlos S. y empleando un DNI falso, Coto operaba con una fachada meticulosa. Su astucia se evidencia en la repetición de una misma línea telefónica en dos secuestros distintos, detalle poco común en sus métodos. Además, su presencia en redes sociales, aunque limitada, dejó rastros que contribuyeron a su identificación por parte de los investigadores.
Este sujeto, temido por su habilidad para eludir la ley, enfrenta ahora las consecuencias de sus actos. Su detención no solo desentraña sus crímenes pasados, sino que arroja luz sobre la complejidad y sofisticación de las operaciones delictivas que lideraba. La justicia federal deberá desentrañar todos los cabos sueltos de la red delictiva de Claudio Coto y asegurar que responda por sus acciones ante la sociedad.
La tarea de los fiscales federales Javier Arzubi Calvo (Rosario), Matías Di Lello (San Nicolás) y Santiago Marquevich de la Ufeco para ubicar a Coto fue compleja e intensa, afirmaron desde la investigación.