"Quiero remarcar la figura del Negro Torello porque siempre me ayudo mucho cuando viajábamos a La Plata para gestionar ante el gobierno de la provincia de Buenos Aires"

La calurosa jornada en el salón del concejo deliberante no fue un impedimento para que minutos después de las 11 de la mañana gran parte de los concejales que estuvieron en 1983 llegaran y se sentaran en las bancas. La diversidad política que tuvo la vuelta a la democracia hizo que el concejo ramallense tuviera representantes del peronismo, radicalismo, el partido Intransigente, y el Movimiento de Integración y Desarrollo. Allí estaban los hombres que marcaron la vuelta de la democracia para rendir homenaje a Roma.

“Balito” habló de todo, dejó frases como “ahora que pensé que me iba a encontrar con muchos en la mesa del club Social ya no están” hoy vive en Villa Ramallo desde hace varios años y participa de cada una de las invitaciones que recibe política e institucionales. Se casó con Araceli Menchini, su novia en el inicio de la militancia a quien cuando todo finalizó le dio un abrazo cargado de amor. Araceli, lo escucho atentamente y por momentos también estaba muy emocionada recordando los inicios en el 1970.

Militancia en los ‘70

Roma, dijo que su militancia comenzó entre 1970 y 1971, cuando se fue a una reunión invitado por Jorge Tellería y Raúl Comolli. Tellería quien fue uno de sus funcionarios lo escuchaba atentamente desde uno de los espacios del concejo deliberante. Después hizo mención a las elección de 1983, que paradójicamente este domingo, como aquel domingo, se cumplen 39 años de aquel día. “ganamos la elección y hubo doble festejo en Ramallo, por un lado nosotros con el peronismo y por otro el radicalismo que festejaba el triunfo de Alfonsín y Armendáriz. El 31 de octubre a las 10 de la mañana me fui al almacén del Negro Torello que había sido electo concejal del radicalismo y le dijo vamos a ponernos trabajar. Quiero remarcar la figura del Negro porque siempre me ayudo mucho cuando viajábamos a La Plata para gestionar ante el gobierno de la provincia de Buenos Aires, también la figura del Titán Armendáriz (Gobernador de la provincia 1983-87) que siempre nos escuchaba, así como también sus ministros de los cuales me hice amigo” contó.

Los ‘90

En otro tramo hizo una crítica a los ’90 y expresó que se dio un proceso de farandulización de la política. “Los ’90 significaron una forma muy fea de la construcción política” dijo al tiempo que agregó “fue un tiempo de ostentación, de búsqueda movilidad ascendente a partir de la propia política, se transformó y termino muy mal y por momento pasamos a escuchar el grito callejero del que se vayan todos, yo salía con algunos compañeros y nos gritaban los taxistas hdp. La política cambia y después hubo revitalización de la militancia y se recupero la política como un acto de transformación”.

“La ética de la responsabilidad”

“Uno construye como se define el ser política, en primer lugar la pasión, sin pasión no hay ser político, pero con pasión solo no hay un político. Eso va a acompañado de otras cosas, de lo que Max Weber dice La ética de la responsabilidad de hacerse a cargo y saber las consecuencias de la acción que produce, significa actitudes de vida muy responsables. Significa la defensa de los derechos humanos, de la constitución, de las leyes, que es lo que todo el mundo define como la gobernabilidad y a su vez el dirigente político necesita incorporar algo que valoro mucho que es la mesura, el temple, que fundamentalmente aparece en la toma de decisiones. La pasión tiene que estar al servicio de la causa y a la causa hay que protegerla” remarcó Roma.

La iniciativa de declararlo ciudadano ilustre nació de Ismael Cóceres y Ernesto Nava, quienes integraron el cuerpo legislativo entre 1983 y 1987 y fue aprobada por unanimidad por parte de los concejales.